Tiempos de mirar por las ventanas….(en tiempos de Covid-19)

En casa…

Tiempos de mirar por las ventanas, de calles desiertas y hogares repletos, de caminar lo justo, de angustias inciertas y nostálgias pasadas.

Tiempos de buscar menesteres guardados, de llamarse con tiempo, de planear lejano.

Tiempos de tiempo sobrado, de manos lavadas, de comidas caseras, de tardes de meriendas, tiempos de risas cercanas, de peleas de hermanos, de unión o desunión, de conocerse o de descubrir desconocidos.

Tiempos de cuidar macetas, de acoger aburrimientos, de apreciar lo bueno, de quejas prestadas, de miedos, aunque también de esperanza.

Tiempos de aplausos inmensos, de lecturas pausadas, de directos online, de café de la tarde, de siestas obligadas, de compras alargadas, de usar lo viejo, de empezar algo nuevo, de agotarse en los hospitales, de Neflix, de recuerdos repetidos, de hacer bizcochos.

Tiempos de papa y mamá o tiempos de recordarlos, tiempos de hermanos, de salir a la terraza, de ingenio, tiempos de urgencia en el ánimo, de mostrarse en las redes, de soñar libertad, de pláticas, de anhelos, de fandangos, de recetas guardadas, de libros olvidados.

Tiempos de imprecisos, de imaginar, de amaneceres tardíos, tiempos, como dice Mastretta, de quererse de lejos.

Hasta la próxima,

Lourdes Vidal