Ocurrió el otro día

Ocurrió el otro día, fue sólo un instante, pero estuve en él.

Me encontraba en mi cama, echada encima de la colcha, ya no recuerdo si estaba leyendo o me disponía dormir la siesta, pero sí recuerdo, perfectamente, que me giré hacia una de las mesitas de noche a coger algo, y ocurrió!.

Me sentí en absoluta calma, y pude experimentar perfectamente un espacio, como si saliera de mi, donde mis emociones ocurrían y campaban a su antojo, y mis pensamientos se movían sin obstáculos ni ayudas, y a mí me daba igual que las emociones fueran desagradables o los pensamientos obsesivos; no me importaba nada de eso, pues tenía la certeza de que estaba yo y el espacio donde ocurrían esas emociones y esos pensamientos.

Me sentí muy poderosa, porque supe que a partir de entonces no tenía que importarme lo que sentía o pensaba, las emociones, las sensaciones o los sentimientos, porque podría crear espacio y dejar que hicieran lo que tuvieran que hacer, y a mi no me afectaría, sería libre!.

Fue sólo un instante, un breve instante ralentizado, un instante lleno de eternidad , donde ocurrió, que por primera vez en mi vida, fui realmente consciente.

Ahora  intento repetirlo, pero no soy tan efectiva…aunque ahí sigo en mi empeño de seguir atrapando la eternidad de cada instantes , al menos ahora se lo que es ser libre 🙂 .

Hasta la próxima,

Lourdes Vidal